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ESGUINCE CERVICAL
¿Qué es el Esguince cervical?
Este término es conocido no sólo como esguince sino también como latigazo cervical, siendo utilizado por primera vez por H. Crowe en 1928, el cual usó dicho término para describir los efectos de las fuerzas repentinas de aceleración-desaceleración en accidentes automovilísticos que causaron lesiones en la columna cervical. Antes de ello, en el siglo XIX estos efectos eran llamados como el “síndrome de la columna del ferrocarril”. En la actualidad el uso de este término es controvertido, ya que no sólo las colisiones obtenidas en accidentes de tránsito pueden producir este conjunto de lesiones en el cuello, ya que existen otros eventos como actividades deportivas que causan un lesivo movimiento repentino de la cabeza.
El significado de esguince parte de la palabra en latín “exquintiare” que se traduce como desgarrar, al enlazarla con la palabra cervical, hace referencia al desgarro o distensión de los músculos o/y ligamentos del cuello.
En el esguince cervical o whiplash, la cabeza se estira bruscamente, tensando los músculos y ligamentos del área de la columna cervical, adicionalmente provoca estiramientos excesivos de estas estructuras. Los afectados generalmente manifiestan cefalea y dolor de cuello, pero además del dolor muscular y la tensión, son posibles otros síntomas.
A esta lesión también se le llama latigazo cervical, debido a que el movimiento lesivo suele ser similar al movimiento de un látigo, lo que involucra un rápido movimiento de aceleración-desaceleración, que en el cuello se traduce como una máxima extensión (hiperextensión) y una máxima flexión (hiperflexión).
A continuación, desarrollaremos diversos tópicos relacionados con esta lesión de cuello, hablaremos sobre los síntomas característicos, que otras colisiones suelen ocasionarse, y cuáles son los ejercicios, automasajes y terapéuticas que permiten aliviar el dolor de cuello presente.
Grados del esguince cervical
Esta lesión puede clasificarse según el nivel de afectación, que va desde tensión muscular o distorsión de ligamentos, hasta lesiones en las articulaciones huesos o nervios. Siendo así, los grados del esguince cervical son los siguientes:
Grado 0: sin signos o síntomas (asintomático)
Grado I: dolor de cuello o rigidez muscular sin signos comprobables (el paciente refiere dolor inespecífico).
Grado II: se presenta cervicalgia más signos musculoesqueléticos con pérdida de movilidad o presencia de puntos dolorosos a la palpación (puntos gatillo miofasciales).
Grado III: además del dolor se evidencian signos neurológicos (parestesias, trastornos de sensibilidad, falla muscular, pérdida de reflejos…)
Grado IV: puede presentarse una lesión mayor como una fractura o luxación cervical (generalmente requiere tratamiento quirúrgico).
Causas del Esguince cervical. ¿Por qué se produce?
Esta afección se produce si de repente hay una transferencia de fuerza en la columna cervical desde atrás, presentándose con menos frecuencia desde el frente o el costado. Esto acelera de manera repentina el segmento de la cabeza y el cuello en relación con la parte superior del cuerpo. El mecanismo de fuerza ejercido es de aceleración-desaceleración, el cual ocasiona que la cabeza se sacuda primero de adelante hacia atrás o viceversa, así como también puede ocasionar que la cabeza se mueva rápidamente hacia los lados después de la transferencia de energía o impacto lateral.
Mecanismo de la lesión
En la siguiente imagen podrás observar el mecanismo más frecuente en esta lesión, en la cual una fuerza desde atrás, ocasiona que el cráneo se sacuda rápidamente primero hacia atrás y luego hacia delante, con un movimiento rápido de hiperextensión e hiperflexión del cuello. Debido a este complejo mecanismo de lesión, los tejidos blandos de la columna cervical se lesionan: los músculos y ligamentos del cuello se tensan dolorosamente ocasionando rigidez y disminución de la movilidad. En casos severos, otras estructuras pueden lesionarse, como las vértebras y los discos intervertebrales.
Como hemos comentado anteriormente un accidente en carro es la causa más común de una distensión o latigazo cervical, sin embargo, también puede ocurrir durante otros accidentes tales como:
Accidentes en deportes: durante las prácticas deportivas de boxeo, karate, judo o lucha libre, existe mayor riesgo de producirse una lesión de cuello, debido a los contactos directos sobre el cuello que en cada disciplina se genera.
Accidentes en juegos recreativos: al estar en una montaña rusa o en carritos chocones, los cambios bruscos de posición, pueden afectar el cuello y la cabeza.
Cabe destacar que, en algunos casos, el dolor resultante de estos accidentes también puede ser de naturaleza psicosomática, es decir, el componente psicológico afecta el cuerpo y ocasiona dolor, sin aparentes consecuencias físicas.
Síntomas y Signos del Esguince cervical.
Después del evento o accidente desencadenante, generalmente hay un periodo de latencia de unas horas o días antes de que aparezcan los primeros síntomas.
Los siguientes son los posibles síntomas después de una distensión o latigazo cervical:
Cefaleas.
Cervicalgias.
Rigidez muscular en el área del cuello.
La tensión en los músculos del cuello es palpable.
Movilidad dolorosamente restringida en el cuello y la cabeza.
Mareos o vértigos.
Dolor o molestias en la espalda que se irradian al área del hombro, la mandíbula o la cara.
Dependiendo de la gravedad de la lesión, también puede desencadenarse otra sintomatología, tales como:
Disfagia (dificultad para tragar los alimentos).
Trastornos del sueño asociados al dolor.
Visión borrosa.
Hipoacusia o presencia ruidos en los oídos (tinnitus).
Parálisis facial o en las extremidades superiores.
Desorientación.
Pérdida del conocimiento (síncope)
Marcha inestable.
Depresión o ansiedad.
Por lo general, los síntomas desaparecen después de un corto periodo de tiempo. Pero en algunos casos, los síntomas pueden durar meses o incluso años. Dicha cronificación ocurre particularmente en personas que ya tenían daños previos al accidente o en los casos que exista un daño nervioso, retrasando el proceso de curación pudiendo provocar también un daño permanente.
Complicaciones del esguince cervical
En la mayoría de los casos esta lesión, puede resultar inofensiva, sin embargo, en algunos casos pueden ocasionar graves complicaciones, estas pueden incluir:
Trastornos visuales, si la arteria carótida interna o un vaso específico se han visto comprometidos.
Lesiones en los nervios que causan hormigueo, trastornos de la sensibilidad o parálisis en ciertas regiones. Afectando también el área del hombro o del brazo, así como las manos.
Pérdida de memoria en el período inmediatamente anterior o posterior al accidente.
Daño óseo a la columna cervical (fracturas vertebrales).
Lesiones en la médula espinal con pérdida de funciones motoras.
Náuseas severas con vómitos.
Lesión cerebral traumática simultánea.
Inconsciencia.
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